Cuando ya no podáis caminar, suplicad fuerzas al Divino Guía, y confiados, atravesad las regiones selváticas del sufrimiento y el dolor, por medio de las cuales las almas se rinden y rescatan sus faltas.
Saldréis incólumes, siendo recolocadas de nuevo y con los pies firmes en el suelo de la vida. Los distraídos, ni siquiera percibirán la gracia recibida, pero aquellos cuyas almas puedan presentir la Excelsa Presencia, agradecerán conmovidos, comprendiendo que el perdón de las ofensas nos eleva por encima del mal y nos reintegra a las Fuerzas Plenas del Bien Mayor.
Salve la Luz!
Nhá Benta
Espíritu amigo que trabaja con nosotros. Fue esclava, pero también fue señora.
El GESJ agradece de corazón Tu participación en las actividades espirituales.
Margarida
p/GESJ
GESJ - 24/04/2007 - Reunión Pública - Vitória, ES - Brasil