El desarrollo del amor sincero en el mundo interior de cada ser, es el mayor objetivo de cada Centella de Dios.
El amor tiene el poder mayor para transformar a las criaturas en hermanos.
Jesús nos amó incondicionalmente hasta su muerte en la cruz y todavía nos ama hoy en día. Sigamos Su ejemplo sublime.
Dejad que el amor domine vuestro ser liberándoos de los tortuosos sentimientos que impiden vuestra ascensión. Amad hasta renunciar a vosotros mismos, en beneficio de la colectividad.
El amor eleva a las criaturas a las cimas celestiales. Amaos hermanos, como el Padre nos ama.
Salve el amor.
Salve Jesús.
Joana de Ângelis
GESJ - 30/01/2007 - Reunión Pública - Vitória, ES - Brasil