Videncia: Inicialmente me vi en una región oscura y con bruma, pensé que era una región del umbral. Sin embargo, enseguida percibí que era la visión del doble de una región del plano físico.
Se trataba de una discoteca en São Paulo o en Río de Janeiro, algo relacionado con fútbol. El dueño, o uno de los dueños del local, creo que era un jugador de fútbol.
En la puerta de entrada del local de diversión, en el plano astral, había 2 lagartos con estatura humana, vestidos con traje y corbata, trabajando como porteros. Era todo muy extraño y hasta cierto punto algo cómico.
Algunos hombres jóvenes llegaban y al pasar por los porteros saludaban; hasta ahí todo bien, si los jóvenes no fuesen personas pertenecientes al mundo físico. Confieso que quedé intrigada con lo que veía. No conseguí percibir cómo funcionaba "la cosa"; sin embargo, me dio la impresión de que los jóvenes humanos eran videntes y les veían como porteros comunes, agentes de seguridad en el plano astral.
Sabemos que entre sus habilidades, los Reptilianos saben camuflar su legítima apariencia mostrándose ante las personas como quieren para impresionarlas.
Enseguida entramos y permanecimos ligeramente apartados. En un determinado momento se cerraron las puertas detrás de nosotros y nos vimos dentro de un gran salón donde predominaba una luz roja.
Un hilo de luz en forma de tubo circundaba a todas las personas; no pude ver de dónde procedía. Esa especie de cordón, tras amarrar al grupo, los ligaba atravesando el chakra esplénico de cada uno. Era como si fuese un collar donde las personas eran eslabones y el hilo de ligación era el tubo de luz.
Después vi llegar a un hombre vampiro, fuerte, de aproximadamente 2 metros de altura, que comenzó a succionar las energías de las personas del grupo, a través del tubo de luz.
Al final de la operación, saciada su sed, se retira, y sus seguidores, empleados, deshacen el cordón.
Tras la increíble videncia, uno de los amigos del GESJ pasó mediante psicografía la explicación:
Los Magos Negros
Dotados de extrema habilidad para dominar, los Magos Negros se dedican a organizar grupos de trabajo que les sirven como instrumento de manipulación y abastecimiento de las energías de encarnados.
Estudios meticulosos preceden a la elección de "los ambientes" y de los "grupos de encarnados" que les sirven de alimento energético.
Posibles daños en el organismo humano del donante son calculados para que no se agote la fuente abastecedora, cuyos donantes, inconscientes e involuntarios, no fallezcan ni caigan enfermos.
Toda la organización y aprisionamiento a distancia representa un despliegue de energía considerado precioso para los Magos, por lo tanto, las víctimas no pueden ser descartadas.
Los grupos escogidos se van alternando para suplir las energías de su Señor, que domina una extensa área de control de varios grupos.
Mientras un grupo se reanima del último "almuerzo" absorbido por el mago, este se aprovecha de otro grupo, de manera que al regresar al primer grupo sus componentes hayan tenido el tiempo suficiente para reponer las energías necesarias para servir de alimento al vampiro.
Muchos humanos, piezas claves por la facilidad que ofrecen en la transfusión de energías, son cuidadosamente monitorizados, acompañados de cerca en su día a día para que otros espíritus no se apoderen de ellos robándoles la carga preciosa.
Esas personas son víctimas del apego a la materia. Se creen inmunes al mal, pues todo les "sale bien". Es obvio que están realmente protegidos por los tenebrosos. Se refuerza en su subconsciente la confianza de que no son malas personas, pues consiguen todo lo bueno y positivo en el plano físico, con facilidad.
Tristes de aquellos hombres que depositan su satisfacción interior en los bienes temporales. Son esclavos y ni siquiera se han dado cuenta de a quiénes sirven.
Muchos entrarán en shock al descubrir que el tiempo que vivieron encarnados alimentaban a almas perversas y dominadoras, cuyas tendencias destructivas se aprovecharon de sus energías para practicar el mal, en actos innombrables. Terráqueos, cuidad los bienes preciosos que recibisteis.
Atended al empleo cuidadoso y amoroso de las energías que recibisteis del Padre. Estas se destinan no para vuestro ocio terrenal, sino para el trabajo constructivo del espíritu en desarrollo en la Tierra.
Servid más, cuando os aceche la duda. Entregad al Padre vuestros deseos, pues nada sucede que no sea Su Voluntad, y ningún designio es ignorado por Él, les cabe apenas a los hombres la aplicación de la Ley de Retorno que afirma que a cada uno según sus obras.
Trabajad y esperad la bendición del tiempo regenerador que os brindará con las dádivas del progreso de la liberación.
Nicanor
GESH - 11/05/2001 - Vitória, ES/Brasil
Nota: Mensaje extraído de la Divulgación 28.