Hijas amadas! El sufrimiento, como sabéis, forma parte de este mundo. Que este no os enturbie la mirada, nublando la visión de la senda por la que debéis caminar para salir del labirinto de dolor al que os aprisionasteis.
Siguiendo adelante, radiante, el Hijo tan amado que por mi vientre llegó a este mundo, os indica el camino, pues Él es la Verdad y la Vida.
Sabemos las dificultades y los apegos que os prenden a la materia, pero venimos hasta vosotros para recordaros las maravillas intangibles que os esperan. Somos una sola familia de seres hermanos, en convivencia fraterna como nos enseñó Jesús.
Se Él no hubiese vivido con nosotros en la Tierra, cómo íbamos a saber e poder del Perdón y del Amor Incondicional? A Él le debemos todas las lecciones recibidas y en Su Nombre debemos caminar, buscando el perfeccionamiento de nuestras almas.
No miréis vuestros errores, pues son errores de espíritus atrasados y bien sabéis que lo sois. Antes, experimentad el descubrir, en el interior de vuestro ser, las luminosidades de la Centella Divina, que pulsa vida y libertad, ansiando existir en plenitud. Procurad expandir esa Luz que ya existe, pues solamente ella será capaz de apagar las sombras que insisten en habitar en vuestro interior.
Jesús Amigo, de manos dadas, sigue con vosotros, velando por toda la humanidad, conduciéndoos por el camino del progreso.
Nosotros os aguardamos.
Salve Jesús! Salve el Maestro de la Luz.
María
Madre de Jesús
GESH - 03/05/2015 - Festival de Wesak - Jacaraipe - Serra, ES - Brasil