Videncia - Vi, en una sala, varios jóvenes tumbados. Percibí que todos estaban entre los 10 y los 20 años de edad, chicos y chicas, si bien la mayoría eran chicos.
De sus cabezas salían unos que estaban conectados a Vampiros, uno para cada joven. De la cabeza de cada Vampiro salía un líquido oscuro que entraba en la cabeza del joven a través del tubo, quedando fijado en su mente astral.
Después vi a esos jóvenes llevando una vida normal en el plano físico, hasta que el Jefe de los Vampiros necesitara una cuota extra de energía, cuando este activaba la mente de los jóvenes, haciendo que el líquido entrara en sus mentes, circulando y anulando la mente espiritual.
En ese punto, el Vampiro les inducía a hacer lo que él quisiese: suicidios, violaciones, asesinatos, crear confusiones para generar agresiones, rebeldías y odios.
Le pregunté al Instructor quiénes eran esos jóvenes y me informó (Rochester) que eran ex-Vampiros que habían reencarnado compulsivamente, pero que no habían cortado totalmente la conexión con sus Maestros de las Sombras.
Enseguida, Rochester envió un mensaje:
Salve la Luz y la paz del Maestro Jesús!
Los movimientos de este "Final de los Tiempos" abren espacio para que los seres de la oscuridad consigan actuar de manera más cercana a los seres humanos que no vigilan su mente, favoreciendo el reencuentro con antiguos Maestros y amores que, de forma trágica, se convirtieron en enemigos.
Los Vampiros, notando y sintiendo que su reinado se terminará y que están perdiendo una parte del mando sobre las mentes de los encarnados, están realizando ataques cada vez más intensos, principalmente hacia los jóvenes que exudan energías fuertes y vibrantes, fácilmente detectadas por los astutos Maestros de las Sombras.
Intimaron con sus secuaces y reclutaron a sus pupilos encarnados, para que estos les fornecieran la savia para nutrir sus cuerpos, con la intención de resistir las largas batallas contra los Ejércitos de la Luz, pues sin esa cuota extra de energía, no conseguirán entablar batallas de larga duración.
Sus principales fuentes de alimento no son solo los trabajos de Magia Negra, los mataderos o los asesinatos. Ante la dificultad, han buscado nuevas formas, infelizmente proporcionadas en abundancia por los incautos encarnados.
Por lo tanto no es solo la energía de la sangre que alimenta a los Vampiros; ellos absorben la energía del sexo, de las emociones descontroladas, principalmente de la tristeza desmedida, induciendo a las víctimas, preferentemente jóvenes, al suicidio, succionando las energías acumuladas en sus jóvenes cuerpos astrales.
En las batallas que entablamos con esos seres, procuramos libertar a los jóvenes que están bajo el dominio de los Maestros Vampiros, principalmente los que están encarcelados. De ahí el número creciente de atrocidades cometidas por los jóvenes, donde las agresiones sexuales son una fuente preciosa de alimento, por fornecer los ingredientes para revitalizarlos durante muchos días, así como el miedo, la lujuria, el odio, y al concluir el acto, el alimento aún continua siendo fornecido por la víctima, con la rebeldía y la tristeza, que desencadenan en depresión. Para ellos, esa es una fuente inagotable de energía.
Luchemos con fe y amor, pues la caída moral de la humanidad ha servido de brecha para que los Mentores del Mal creen sus "ejércitos de zombis".
Paz a todos.
Conde Rochester
GESH - 27/06/2015 - Vitória, ES - Brasil
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