En el nombre de Jesús, del Poder y de la Luz, nos reunimos una vez más.

La alerta ha sido activada. Oriente está en ebullición con los conflictos que nos pueden ser controlados.

Vuestros hermanos americanos atacan Irak clandestinamente y la respuesta a estos ataques viene de inmediato.

Son muchos los soldados que entregan su vida por un ideal de esclavitud. Aquellos que creen ser superiores, como raza elevada y elegida, no poseen la necesaria humildad de mirarse a sí mismos y percibir que su propio pueblo está enfermo. Incentivados a valorizar la vida material, no cuidan de las almas de sus hijos. La Luz espiritual que esclarece ha quedado escondida y los pocos que se aventuran a buscarla y expandirla, lo hacen como en los tiempos de Jesús, en solitario.

Oriente está en ebullición y ya no queda ningún punto que no esté contaminado por las guerras o guerrillas. El pueblo humilde asiste a todo inerte, rogando a Alá, el final. La incredulidad de muchos aumenta el sufrimiento de todos.

Estamos reunidos a pedido de la Confederación, para que Grupos Socorristas den soporte a los hermanos superiores, que descienden al Orbe en estos momentos, para detener la mano que impacientemente espera la llamada del teléfono para lanzar al Mundo la devastación.

Nuestras tareas son de soporte y mantenimiento energético, pues es necesario que las áreas en la que actuarán nuestros hermanos tengan una mínima frecuencia armónica, para que se puedan materializar y servir con sensatez.

En caso de que la operación no tenga éxito, pues siempre será respetado el Libre Albedrío -señor de vuestras pruebas-, otros Grupos estarán preparados para entrar en acción. El Padre así lo determina.

El Padre de Amor y Misericordia hará relucir en el cielo de Oriente y Su señal.

Que Jesús os bendiga! Paz y Amor!