Videncia - Vi al Ejército del Abismo marchando a paso firme hacia la superficie. Noté que a medida que avanzaba subía desde el suelo del abismo un polvo negro que llegaba hasta la superficie terrena.

Hermanas, la Luz os envuelve en las horas supremas de pruebas.

Las fuerzas telúricas negativas envuelven a la humanidad, que viviendo en la ignorancia que silencia la consciencia, no percibe el peligro que la ronda.

La capa de polvo negro que sube desde el Abismo, por causa de los movimientos de los "ejércitos de las tinieblas" que preparan las batallas, enturbia el brillo del Sol, que se esfuerza, pero no es capaz de quemar todos los miasmas que se esparcen en el aire durante las maniobras de los ejércitos de las Tinieblas. Con esto se produce un aumento en la variedad de dolencias, que la industria farmacéutica no consigue desvelar con la rapidez en la que surgen.

Así, otra consecuencia de la inhalación por parte del cuerpo astral de ese polvo que sube hasta la superficie, es la ceguera espiritual creciente. Ese polvo, sutil por naturaleza, actúa en la mente que no aplica la dosis curativa del Evangelio en el día a día. Por lo tanto, los comportamientos alocados y violentos de los hombres aumentan, a medida que disminuye la fe y la fraternidad entre los hijos de Dios.

Coraje, hermanas, hijas de Dios, pues la información y las alertas que os llegan son un factor más a sumar en el compromiso que asumisteis. Sois conocedoras de las férreas luchas que enfrentaríais en los combates a la negatividad que os envolvería en tantas caídas en otras existencias.

Sed valientes y fuertes, hermanas.

La Luz os guía.