¡Amados discípulos!

Un año más finaliza, sin que la humanidad presente un mínimo de elevación moral.

Las dificultades y luchas enfrentadas por la humanidad no fueron suficientes para detonar, en lo íntimo de las criaturas el deseo de cambiar la trayectoria de los errores, para la renovación y el progreso de sus almas.

Las Huestes de Luz que conducen los destinos de esta humanidad predijeron, hace muchos milenios, aún en formación del planeta y de la humanidad, el momento de eclosión de los desarreglos que accionarían los dispositivos del Juicio Final.

Bien sabéis que esta hora ya está avanzada y el planeta Tierra acelera sus movimientos, pues se encuentra profundamente perturbado y mortalmente herido, deseando alcanzar la dimensión superior, que traerá el bálsamo y el refrigerio para el cuerpo planetario.

La humanidad es seleccionada ya hace mucho tiempo, definiendo a los derechistas y los izquierdistas de Cristo. Sin embargo, las oportunidades no cesan, aún ahora, de transformar y cambiar el patrón vibratorio, adelgazando la densidad de sus almas, para habitar un mundo no tan primitivo, atrasado y denso, como la Tierra, en el momento.

Jesús, amorosamente conduce a Su “rebaño” al Reino del Padre, aunque sean pocos los corazones que estén vibrando en Su armonía de amor y paz.

¡Discípulos y discípulas amadas, las luchas continúan, en ambos planos de la vida!

El Grupo Espírita Siervos de Jesús prosigue en su camino de revelaciones para la humanidad, de consuelo y de esclarecimiento. Mensajes son enviados de los planos superiores para concita aquellos que desean modificar su trayectoria.

Cada discípulo que cumple con amor sus tareas, con sinceridad de propósito, con sacrificio y renuncia en la Siembra bendita de Jesús, fortalece la egrégora de esta Casa, que sirve a Jesús, en el cumplimiento de la Voluntad Mayor de Dios.

Recibís cada uno de ustedes, amados discípulos, el beso de amor que os enviamos, en la certeza de que estaremos con ustedes en todos los momentos de vuestra existencia terrena, para que consigáis culminar la "encarnación clave", victoriosa, con vuestras almas iluminadas y merecedoras de habitar la Nueva Tierra.

No os juzguéis injusticiados o abandonados por aquellos que, desde lo Alto, os guían. Debéis vosotros comprometeros, cada vez más, para cumplir con gallardía las tareas que os corresponden, para la iluminación de vuestras almas.

Somos un conjunto de trabajadores Siervos de Jesús y debéis avanzar sin miedo en la siembra del bien.

No os abandonamos y deseamos que caminéis seguros rumbo al progreso espiritual.

No abandonéis, bajo ninguna hipótesis, las trincheras de la lucha, aunque vuestros cuerpos físicos se resientan con dolores y fatigas. No dudéis de vosotros mismos, que sois capaces de afrontar las luchas programadas para vuestra existencia, sean ellas kármicas, sean en el trabajo espiritual, que exige del trabajador renuncia, sacrificio y voluntad firme para avanzar con Jesús.

¡Por tanto, adelante, Siervos de Jesús!

La Tierra rápidamente acelera sus movimientos transformadores y el mundo se renueva y avanza para la transformación final, trayendo como consecuencias dolores, sufrimientos y crujir de dientes para la humanidad.

Y sois de aquellos que se hacen eco de las voces de consuelo, alerta y esperanza para la humanidad, todavía tan atrasada e ignorante.

¡Jesús os bendiga! ¡Nosotros os bendecimos!

¡Salve, Jesús!

Ramatis, contigo, hoy y siempre.

 

Maestro Ramatis

GESH - 17/12/2021 – Vitoria, ES – Brasil

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