¡La Paz de Nuestro Señor Jesucristo esté entre nosotros!

¡Mis hermanos, aguardar la felicidad en realizaciones materiales es eludirse!

Es en la comunión con Dios que encontramos la verdadera felicidad, plena y perenne.

Las dificultades y problemas de la existencia física son inherentes a las faltas anteriores, a la densidad del espíritu que necesita de la reencarnación en el mundo de la materia para iluminarse, a través de las dificultades de la vida.

El fundamento más seguro del alma es el Evangelio de Cristo, guion divino que es sedimentado a medida que el alma se transforma con Jesús, modificando su espectro de Tinieblas en Luz y expandiendo, desde su corazón, el amor y la bondad, la renuncia y el perdón. Solamente así, un alma consigue iluminarse a su alrededor, siendo atraída naturalmente por los planos divinos, lejos de los sufrimientos y de los planetas atrasados.

Cultivemos, en nuestros corazones, la bondad y el amor enseñados por el Señor Jesús, para contribuir con las Fuerzas del Bien en la iluminación de la Tierra.

¡No hay injusticia de Dios en el rescate de nuestras faltas!

Cabe a nosotros cultivarnos en las virtudes divinas y perennes, para alcanzar la gloriosa ascensión en la Luz.

Que Jesús nos bendiga a todos.

Vivamos con alegría y amor, sembrando, a nuestro alrededor, el óbolo de la paz, de la caridad y de la fraternidad.

¡Salve, Jesús!

Chico, con vosotros.

Hermanas, es en la alegría de la transformación que encontramos a Jesús.

¡Salve, la Luz que nos guía!

Chico Xavier

GESH – 30/09/2022 – Vitoria, ES – Brasil