Videncia:

Veo un local muy bonito, iluminado, pero siento dificultades para fijarlo. Una leve cortina de humo blanquecino lo hacía desaparecer de repente. Siento una fuerte somnolencia y me cuesta mucho permanecer atenta. En esa situación percibo que alguien habla:

¡Salve hermanos y amigos!

¡La Fuerza de la Luz os guía!

No hay paz sobre la Tierra, porque tampoco la hay en los corazones. En lo recóndito del alma, aún predominan las fuerzas animalizadas, extendiendo sus tentáculos sobre las personalidades humanas.

Vivís una era de dolor.

Los tormentos estallan sin preaviso, desencadenando el desorden emocional y moral que domina la humanidad.

Las deformidades del alma humana atraen a las crías de la Bestia, sirviéndoles de alimento y recarga energética. Los tenebrosos buscan su nutrición donde los hombres se entregan a los placeres.

Silenciosamente se descortinan los preparativos para la gran tempestad. La violencia y el dolor subyugan a la población hambrienta, mientras que el sopor inmoviliza a los débiles. Muchos se sienten debilitados por el tiempo perdido, intentan prestar una ayuda que llega demasiado tarde y que en otro tiempo negaron al mundo.

"El Proyecto Tierra" ha fracasado en su propósito de promover el progreso entre los seres humanos. Las criaturas se complacen en el sufrimiento, generando más y más tormentos para si mismas.

¿Cómo vamos a alzar el vuelo por encima de las densas y grises nubes si nuestros pies damnificados se agarran al suelo como plomo?

¿El libre albedrío, herramienta que catapulta el progreso o lanzallamas que pulveriza el alma y la lleva en dirección al abismo?

En todo lo que hagamos, el camino más seguro es el Evangelio de Cristo. Siguiendo sus recomendaciones, triunfaremos.

Joana de Ângelis

GESH - 14/03/2008 - Vitória, ES - Brasil