¡Que Nuestro Señor Jesucristo bendiga a la humanidad y al Planeta!
¡Bendiciones de paz y amor los envuelvan a todos!
La Doctrina de los Espíritus es el Consolador prometido por Jesús, siendo que la doctrina divina del Maestro Nazareno es la base luminosa que convierte sólida la enseñanza de Luz.
No os apeguéis demasiado, queridos hermanos, a la fenomenología mediúmnica, torturando mentalmente a los adeptos en la comprensión de los complejos mecanismos del magnetismo científico. Lo que importa verdaderamente es la comprensión del discípulo de la vida extracorpórea, concluyendo por sí mismo, a través del estudio de la vasta literatura espírita, quién es, de dónde viene, para dónde va y qué está haciendo aquí en la Tierra.
A medida que el discípulo avanza en los estudios de la doctrina reveladora, su conciencia se expande, su corazón se ilumina y el alma trasciende las barreras materiales, vibrando con amor y fe en las dimensiones superiores. Si fija la mente sólo en el fenómeno, desvía su atención del objeto principal y elevado de la doctrina transformadora.
Los espíritus trajeron, a través de sus comunicaciones amorosas, el estudio filosófico, científico y religioso, procurando, de la manera más clara y sencilla posible, traducir para la humanidad encarnada que el alma sobrevive a la materia, recorre por infinitos ciclos de progreso, a través del propio esfuerzo. en la superación de los sentimientos inferiores, en la práctica sincera del Evangelio de Cristo.
Este debe ser el foco principal de los estudios en los Centros Espíritas. La criatura debe comprender verdaderamente que es a través del perdón de las ofensas y del amor al prójimo que conseguirá superar los planetas de pruebas y expiaciones y alcanzar los mundos regeneradores. Deberá ampliar su consciencia, comprendiendo y aceptando la presencia amorosa de los seres extraterrestres y el mundo iluminado de los intraterrenos. Comprender y agradecer por la presencia de seres magnánimos de altísima elevación espiritual, caminando lado a lado con la humanidad física e invisible, ayudando en el mejoramiento del ser y en la liberación de las almas del cautiverio del atraso moral y espiritual, así como ayudando al planeta, marco divino que se encuentra gravemente herido.
Hermanos, que vuestras consciencias se liberen de las culpas pasadas y desarrollen una fe radiante, que purifica el alma, haciéndola humilde y amorosa.
Jesús bondadoso, Maestro Divino, Director Mayor, bendice a todos.
Kardec, con vosotros.
¡Salve, Jesús!
Allan Kardec
GESH – 12/08/2022 – Vitoria, ES – Brasil